jueves, 11 de noviembre de 2010

Nosotras, creadoras de la realidad más irreal.

¿Volvemos a lo de antes? ¿Volvemos a lo de siempre? Se suponía que habías superado eso. ¿Qué ha pasado? Estás volviendo a caer, demasiado rápido. Recuerda la felicidad de estar bien, de estar sana.
Caes demasiado deprisa. ¿Qué ocurre?

Párame, quiero que me pares. No me dejes caer, no dejes que caiga en ese agujero negro. No dejes que mis ojos se tiñan de lágrimas negras... Ni dejes que mi cuerpo se convierta en huesos y piel sin sentido. Por favor, sálvame de esta tortura, sálvame del horror de la locura de mi mente. La locura que cada día crece y me come por dentro, me va destruyendo hasta que no sé controlar lo que es real y lo que no. ¿Qué es real? ¿Qué es ficción? Yo sé que yo soy real, todo lo demás, supongo que es real, pero nunca lo sabré con certeza. Pero mi mente es mi mente... es astuta, pero a la vez tan débil como para haber sido manipulada por los hilos de la degradación. ¿Cómo has podido llegar a esto? Mi mente ya no sabe qué es irreal. Para ella, todo es real. Somos nosotras, creadoras de la realidad más irreal... Una irrealidad que para nosotras es verdaderamente real. Por favor, no me dejes caer en este mundo de ficción. Sé que está mal, sé que no es real, sé que todo son imaginaciones mías... pero es muy frágil. Es demasiado frágil, protégeme de esto.

Sálvame.